Lo esencial es invisible a los ojos: la pedagogía del corazón Spínola

Cuando vienen a visitarnos al Colegio Cardenal Spínola Madrid, la gente percibe algo diferente, algo que nos hace especiales. Normalmente no saben explicar qué es. Y es que, desde el colegio sabemos que la educación no es algo que se pueda explicar con una pizarra, una tableta o en una tertulia dialógica. La educación es algo que se transmite por osmosis, de corazón a corazón y que poco a poco va penetrando la pedagogía del corazón en todo el que se roza con el Spínola. 

Cuando Steve Jobs mostró su primer iPhone se generó una gran mofa porque era un teléfono sin teclado que costaba 600$. En aquel cercano/lejano 2007 lo que estaba en su prime era la Blackberry que incluía ¡más de 30 teclas en el espacio de un teléfono!

Cuando hablamos de que la mayor innovación educativa tiene alrededor de 150 años y consiste en algo tan básico como tratar de corazón a corazón, la gente nos mira cómo se miró a Steve Jobs en el momento del lanzamiento del iPhone. Pero Steve Jobs y Marcelo Spínola lo tenían claro: no hay mayor innovación que partir de lo más básico y revolucionar todo.

Una vez en el colegio, descubres que de poco sirven las múltiples metodologías educativas que se llevan a cabo día a día en el Colegio Cardenal Spínola Madrid si no se hace de corazón a corazón. Porque cuando se hace desde la pedagogía del corazón la actividad cala, el niño se siente acogido, el educador se siente cómodo… todo fluye de un modo natural.

Esta forma de vivir viene en cascada. Por un lado, la Fundación Spínola comparte con los equipos directivos su misión. Estos, a su vez, transmiten esta pedagogía del corazón a sus claustros. Y, por último, los profesores con familias y alumnos. Por eso, todos los profesores llevamos grabado que “educar no es otra cosa que formar el corazón”. Este sello conlleva situar al alumno en el centro de cualquier acción educativa.

En el Colegio Cardenal Spínola Madrid nos adaptamos a cada uno de los alumnos. Esto que parece lo lógico, es un cambio de paradigma educativo. ¿Quién de nosotros no ha vivido la experiencia de tener que adaptarse al modo de enseñar de nuestro maestro?

¿No crees que algo tan básico revolucione la educación? ¡Atrévete a visitarnos!, pero prepara todos los sentidos: ya sabes que lo esencial es invisible a los ojos.